domingo, 27 de noviembre de 2011

Concurso de poesía en Tixpéhual en la sesión dedicada a Jaime Sabines


Presentamos los últimos poemas que se escribieron en la sesión de poesía dedicada a Jaime Sabines en el plantel de Tixpéhual. Disfruten la poesía.

La luna acaricia tu cuerpo

Sobre las olas del mar

Mirando luciérnagas

El incendio de mi corazón,

Las algas dejan cicatrices

En el fondo de mi ser…

Alejandra Kuk


Quisiera algo hermoso que ilumine mi alma, algo como una luna, una luna de tu cuerpo donde pueda nadar, ilustrando y apagando miles y miles de luciérnagas en incendio, y hasta las algas del fondo marino se marcan con cicatrices, dolor del mundo.

Emir Stifen Eb Varguez


En la noche, cuando sale la luna junto al mar, admiro tu cuerpo, brillante como las luciérnagas. Me incendio por tocarte, pero las algas me lo impiden, y me quedo muy triste e incendiada, cicatrices en el alma por no tocarte ni sentirte en mis brazos.

Yessica Ku Pech


Viendo la luna toda la noche

Mi cuerpo se estremece al pensar en ti

Un mar que reboza en mi ventana

Luciérnagas que iluminan la memoria

Un incendio que recorre todo mi cuerpo

Frías algas

¡entonces!

¡Para qué pensar en ti!

¡Cicatrices en mi alma!

José Antonio Caamal Mex


La luna es tan hermosa como la vida.

La vida es un mar de cicatrices que nunca sanan,

Simplemente se olvidan.

En incendio de algas borras todas las cicatrices de mi cuerpo

Y me vuelvo, entonces, luciérnaga.

Heydi Puch


La luna es un cuerpo celestial, que ilumina al mar sin cesar, las estrellas son como luciérnagas en el cielo que parece un incendio y a la vez ilumina todo el cuerpo, las algas con como la piel, suaves y frescas, las cicatrices déjalas atrás porque con ellas no podrás prosperar.

Diego Tun


Bajo la luna siento tu cuerpo, bajo el mar enredando tus algas, formando cicatrices con fuego de luciérnagas alrededor de mí.

Damián Marmolejo


Esa noche de verano, la luna iluminaba tu cuerpo, mientras que en la orilla del mar, una lluvia de luciérnagas contrastaba tu brillo, igualando al de un incendio en medio de algas, reparando cicatrices que otras lunas habían dejado.

Luis Manuel Victoria Chin


El incendio de mi cuerpo es como un mar de luciérnagas en una noche de luna que cicatriza mi alma como un alga sin rumbo en medio del mar.

Carlos Augusto Ku Pareja

domingo, 13 de noviembre de 2011

Aquí les dejo algunos poemas de los alumnos de Tixpéhual. Disfrútenlos:

OTROS POEMAS


Miro la luna en la oscura noche
A través de ella veo tu cuerpo
Me estremezco en un mar de emociones
Mi corazón brilla como las luciérnagas

Mi piel sufre un incendio
Y las algas de tu amor lo avivan
Ahora que te has ido sólo hay cicatrices
Y mi alma espera tu lejano regreso.

Andrea Navarrete




En las noches la luna me recuerda
Tu cuerpo en el mar
Las luciérnagas me recuerdan el incendio de tu amor
Y las algas, cicatrices que no sanan…

Carlos Domínguez Chalé




En la noche una luna
Cubre tu cuerpo como una capa de arena
Que el mar arrastra como algas
A lo profundo del mar
Y luciérnagas brillan en mi alma
Como un incendio de cicatrices
En mi corazón
Brilla la paz…

Rubén Bastrarrachea Aké




Mi cuerpo es un mar lleno de luciérnagas sin luna con cicatrices y algas, incendiado por un amor que me dejo.

Mateo…




Mi corazón está lleno de cicatrices, tan lleno como el mar de esas algas, que flotan y que el viento se las lleva como quiero que se lleve las cenizas del incendio que provocaste en mi corazón. Ya no sé si pedirle a la luna cuando se oculta, oculte tu recuerdo.

Yadira Cauich




Tus ojos son como la luna
Tu cuerpo incandescente como ninguno
Tu pelo como la silueta del mar
Tu como luciérnaga que brilla en la oscuridad
Tus labios rojos como un incendio
Tus manos como algas
Y las cicatrices que guardas
Las llevo en mi alma.

Pablo Pareja




Luna, tú me haces sentir que mi cuerpo sea como el mar, sentirme libre cuando tu cuerpo está junto a mí; pero cuando te vas volando como una luciérnaga, me pongo triste: se incendia en rencor, mi corazón.

Verónica Alonzo Kantún




En las noches la luna brilla como la luz de tus ojos, y se escucha la brisa del mar, el sonido de las luciérnagas. En las algas y las cicatrices siento tu rostro cerca de mí, como un incendio grabado en mi piel…

Blanca de Jesús Kantún Tepal

miércoles, 2 de noviembre de 2011

PRESO DEL MIEDO

De Omar Romero Rodríguez. (Segundo lugar del concurso de poesía 2011 del COBAY)

Mi cárcel es una canción, una canción olvidada,
mi encierro un mal de amor.
Duele pensar que mi existencia está terminada.
Nace un nuevo temor: ¿olvido o engaño?
Ésas son mis cadenas,
tu olvido me duele, me convierto en preso del miedo,
me abandonan mis sentimientos.

He caído.
Me pierdo en el laberinto del olvido,
me resigno, intento no llorar,
es inútil, siempre te he querido